Tras cuatro años seguidos de Pixar reinando en los Premios Oscar, la compañía californiana pronto se vio con la presión de Disney de volver a la franquicia que más ganancias le habia dejado en mercancía y esto ocasionaria que Pixar perdiera por primera vez en mucho tiempo la posibilidad de ganar un Oscar.
Mientras tanto Dreamworks parecía tener la cinta con la que podría ganar el Oscar, un Panda que había quedado opacado hace años frente a un Disney debilitado por malas decisiones, parecía que el Oscar era más que seguro para ellos, ¿o será que un camaleon vaquero podría cambiar las cosas?
Los Annie Awards, después de la debacle que tuvo el año anterior presumió la mayor cantidad de nominados a Mejor Película en su historia al nominar 11 películas:
- Rango (Paramount Pictures)
- Un Gato en París (Folimage) – Francia
- Arrugas (Perro Verde Films) – España
- Operación Regalo (Aardman Animations) – Reino Unido
- Cars 2 (Pixar Animation Studios)
- Chico y Rita (Motion Pictures Spain) – España
- Kung Fu Panda 2 (Dreamworks Animation)
- Gato con Botas (Dreamworks Animation)
- Rio (Blue Sky Studios)
- Las Aventuras de Tintin (Paramount Pictures)
Los Annie estaban teniendo una situación cada vez mas complicada con sus criterios de selección que, a la postre, impactarían mucho en su credibilidad.
Para los Academy Awards solamente Rango, Un Gato en Paris, Chico y Rita, Gato con Botas y Kung Fu Panda 2 fueron nominadas.
Disney se fue sin ninguna nominación en un año muy malo para la compañía del ratón. Ni siquiera Pixar había colocado una cinta.
De sus cintas no Pixar, ambas fueron un fracaso, especialmente Marte Necesita Mamás, que quería seguir el éxito de cintas como Monster House o El Expreso Polar, pero sin nada de imaginación en la forma de manejar la historia. Así, la animación casi fotorrealista que vimos en esta cinta, que no comulgaba nada con el motion caption de las cintas anteriores hizo que la cinta espantara literalmente espantara a la audiencia y nos diera uno de los mayores fracasos en la historia de la animación para Disney (uno que solo Onward, con el Covid-19, pudo igualar).
Y también vimos otra de esas malas decisiones con Winnie the Pooh, ok, no es mala la cinta, pero si sabes que Pooh solo simpatiza con niños muy pequeños y adultos nostálgicos, ¿cómo se le ocurre a Disney estrenarlo el mismo fin de semana que Harry Potter y las Reliquias de la Muerte Parte I? Pese a eso sentiamos a Disney en una de esas zonas de confort en la que se fueron por algo sencillo y efectivo que no esperaba mas que ser un éxito taquillero.
Cars 2 fue otra de esas malas decisiones, especialmente al desviar la atención de la historia al meter una historia de espionaje, intrigas internacionales e incluso mensajes de mejorar el ambiente, pero la parte más dura fue cambiar el protagonista al simpático Mate. Es cierto, no había mucho que contar de Rayo McQueen, per la cinta se salió por completo de las cosas que Pixar nos contaba, lo cual incluso deriva en afirmar que Cars 2 es de las cintas menos favorecidas de la compañía. Eso si, donde la cinta no fracasó fue en la taquilla y sobretodo en la venta de juguetes.
Tambien el 2011 atestiguó que segundas partes no son buenas y la secuela de Happy Feet, dirigida por George Miller fue un completo fracaso, curioso considerando que a Miller si le había funcionado la segunda parte con Mad Max, de ahí que Miller mejor decidiera volver al desierto post-apocalíptico con un resultado maravilloso.
Tres cintas que solo merecen ser mencionadas son: Hop: Un Rebelde sin Pascua, Gnomeo y Julieta y Buza Caperuza 2. También cabe resaltar que México intentó colocar una cinta en el mercado estadounidense con la adaptación al cine de Don Gato y su Pandilla de Ánima Estudios, aunque solo tuvo éxito en el mercado latinoamericano.
De las cintas que estaban nominadas a los Annie Awards que no lograron el corte a los Premios Oscar, la que tenía menos posibilidades fue Arrugas, una producción española que, junto con Chico y Rita, fueron las primeras cintas españolas en ser nominadas a los Annie Awards. La conmovedora historia de dos amigos que intentan evitar ser separados por el Alzheimer que sufre uno de ellos, fue completamente opacada por Chico y Rita y sin duda, su mayor logro fue llegar a ser nominada.
Rio fue uno de los mejores intentos de Blue Sky Studios de generar una cinta original tan exitosa como La Era de Hielo, con una animación llena de colores, un retrato muy simpático del Brasil y la historia de una ave que busca superar su discapacidad para poder volver pacíficamente a su entorno, fue una cinta que marcaba un progreso de Blue Sky, quizá su mayor problema fue la falta de personajes secundarios que realmente engancharan al público cuando dejabamos de ver a las simpáticas aves azules.
Aardman volvía a los Annie Awards con Operación Regalo, una cinta navideña que le mostraba lo lejos que estaba el estudio de los éxitos que había logrado con la animación stop-motion, una aventura que nos muestra como uno de los hijos de Santa Claus, Arthur, trata de mantener las tradiciones de entregar regalos contra lo propuesto por su hermano mayor cuando su padre decide abandonar el trabajo.
Aunque la pelicula es bien intencionada, ese gag del sustituto de Santa no funcionó (¿alguien dijo Santa Clausula?) y estaba claro que esta era una de las cintas menos memorables de la compañia.
Las Aventuras de Tintín fue la gran ausente en las nominadas al Oscar, para mi una de las mejores películas que se han hecho en motion caption, al punto de que hasta debió ser considerado Andy Serkis como mejor actor de Reparto, pero, como siempre le pasó a Serkis en sus personajes mas conocidos (Gollum o Cesar), no lo consideraron para dicha categoría. Claro, su estilo de animación la saco de la contienda por Mejor Pelicula Animada, una pena considerando que tenía nivel suficiente para vencer a cualquiera de las cinco cintas nominadas.
De las cinco nominadas la gran sorpresa fue Chico y Rita, una producción española que encierra una historia de amor entre un músico y una cantante, el crecimiento de los ritmos latinos en Estados Unidos, las intrigas entre los músicos y sus agentes y, finalmente, el racismo que aún imperaba en ese país. Una historia que venía siguiendo los mismos pasos que Persepolis en salirse del molde de hacer una cinta para adultos con una temática humana y una banda sonora exquisita que realmente invitaba al baile.
Pero no fue la única cinta europea, pues también estaba la producción francesa Un Gato en París, que nos cuenta las aventuras de un gato ladrón que de pronto ve como la vida de su socio ladrón y de su ama (una niña) corren peligro al involucrarlos en un complot con un mafioso, unos diamantes y una doble identidad que le es difícil sostener. Aunque las dos cintas fueron geniales, yo me inclino más por Chico y Rita.
Dreamworks venía con una doble apuesta.
De un lado tenía un spin-off de Shrek retratada en Gato con Botas, una cinta que abordaba el pasado criminal del personaje interpretado por Antonio Banderas donde vemos la inclusión de otros personajes de cuentos de hadas e incluso un interés amoroso cuya voz fue proporcionada por Salma Hayek. La cinta tenía una buena dosis de frescura con el simple hecho de haberse salido de la enorme sombra que era Shrek y sus personajes, aún así, siento que, de las cinco nominadas fue la que más entró con calzador.
El verdadero campeón de Dreamworks era Kung Fu Panda 2, la secuela de la exitosa cinta que habían lanzado dos años antes y que, para sorpresa de muchos, no falló en esa premisa de «segundas partes no son buenas» como le paso a Cars, al tratar de explorar un poco más en el pasado de Po y la necesidad de enfrentar los traumas del pasado para poder enfrentar a un peligroso villano que utiliza explosivos para derrotar a los maestros de las Artes Marciales y que tenía un vínculo con su pasado.
Aunque tuvo una de las escenas más absurdas que he visto en Dreamworks («debo decirte que eres adoptado»), Kung Fu Panda 2 no solo mostró consistencia en la continuidad con la cinta anterior, no solo mantuvo los estándares tan altos en la cuestión de la animación, de la ubicación de sus personajes en la trama (que, dicho sea de paso, tenían tambien una serie en televisión que contaba eventos entre las dos películas) y una excelente combinación de comedia y drama que nos hizo notar que Po, pese a ser el Guerrero Dragón, tenía aún mucho que vivir y aprender para estar al nivel que los Cinco Magníficos.
La lógica lo decía, Kung Fu Panda 2 era la gran candidata a llevarse el Oscar, no estaba una cinta de Disney y la competencia no parecía tan fuerte… o eso parecía.
Cuando Warner Bros. liberó Rango, empezamos a pensar que las cosas podrían cambiar.
Rango tenía la combinación favorita que hizo de Piratas del Caribe un éxito rotundo: la dirección de Gore Verbinski y el protagonista, un camaleón mascota, interpretado por Johnny Depp que estaba en su momento más alto, respaldado por un elenco de voces de alto nivel que incluia a Abigail Breslin, Isla Fisher, Bill Nighy y Alfred Molina.
Rango nos cuenta la historia de un camaleón perdido en el desierto que llega a un pueblo donde los animales aún parecen vivir en la era del Salvaje Oeste y pronto Rango debe buscar una manera de ayudar al pueblo a sobrevivir a una sequía frente a un peligroso bandido que tiene oprimida a la gente con el control del agua.
El spaghetti western animado que tenía incluso referencias a Miedo y Asco en Las Vegas, era una cinta más dirigida al público adolescente y adulto, donde los chistes eran realmente maduros y era constante la idea de que habría muertos en cualquier momento (de sed, a balazos, devorados por una vibora de cascabel… ), referencias a las cintas clásicas de vaqueros e incluso mariachis.
El trabajo de animación era bastante bueno, siendo memorable la secuela donde Rango se pasea en unos murciélagos al tono de La Cabalgata de las Valquirias y el Danubio Azul, aunque debo aceptarlo, el guión no era tan consistente.
Siempre me voy a quedar con la duda de cómo Rango llegó a ganar en ambas premiaciones.
En los Annie Awards el duelo fue cerrado donde Kung Fu Panda 2 y Rango llevaban 3 premios cada uno antes de que se declarara a Rango como ganador, siendo una de las grandes sorpresas de la noche (ignoramos si los Annie querían redimirse de lo que le hicieron a Disney el año anterior o simplemente reconocieron el gran trabajo en totalidad de la cinta de Warner Bros.)
En los Academy Awards no nos extrañe que paso algo similar, una decisión cerrada, ante la falta de un candidato más sólido terminó siendo Rango el ganador, sin que supieran nadie en ese momento que la sombra de Disney quedaría sobre el Premio de Mejor Cinta Animada por casi todo lo que quedaría de esa década.
Dreamworks no lo sabía, pero Rango había echado a perder la mejor oportunidad que tenía el estudio para ganar el Oscar desde Shrek y, por lo menos hasta ahora no ha vuelto a ganarlo. Hasta la fecha, solo Sony ha sido capaz de arrebatarle el premio a Disney o a Pixar.
Y ya que hablamos de eso, en la siguiente entrega hablaremos de cómo Disney tomaría por asalto la terna con tres propuestas y el duelo se cerraría entre los videojuegos y las princesas.