Mientras Pixar celebraba en ese momento su triunfo más reciente (y los mexicanos llorábamos por la hermosa historia de Coco), una compañia buscaba redención.
Era el caso de Sony Pictures Animation, una compañía que había estado durante las dos décadas anteriores a la sombra de Disney, Pixar y Dreamworks, que había tenido aciertos comerciales como la trilogía de Hotel Transylvania y desaciertos como la secuela de Los Pitufos, pero el inicio del 2018 se dió el peor momento, no solo para Sony, sino para cualquier compañía de animación, cuando los Razzies anunciaron a Emoji: La Película como la peor cinta del año y máxima «ganadora» de ese evento.
¿Podría Sony encontrar redención en ese año donde los superhéroes tenían especial importancia? Estábamos hablando de un año donde Marvel Studios tuvo tres cintas, incluyendo Avengers: Infinity War que fue todo un trancazo de taquilla, DC tendría a Aquaman y la propia Sony traería una nueva versión de Venom al cine.
Pero Sony tenía un as bajo la manga, una nueva historia de Spider-Man, pero no la que habíamos visto de la mano de Sam Raimi y que Marc Webb contó tan mal a inicios de la década pasada. Era un Spider-Man distinto, pero más importante… animado.
Los Annie Awards tuvieron los siguientes nominados:
Pelicula independiente o extranjera
- Mirai (Studio Chizu, Japón)
- Ce Magnifique Gateau! (Beast Animation, Francia)
- MFKZ (Ankama, Francia/Japón)
- Ruben Brandt: Coleccionista (Hungarian National Film Fund, Hungria)
- Tito and the Birds (Bits Productions, Brasil)
Mejor Película Animada
- Spider-Man: Un Nuevo Universo (Sony Pictures Animation)
- El Cavernícola (Aardman Animation)
- Los Increíbles 2 (Pixar Animation Studios)
- Isla de Perros (Fox Searchlight Pictures)
- WiFi Ralph (Walt Disney Animation Studios)
En los Academy Awards los nominados fueron:
- Los Increíbles 2
- Isla de Perros
- WiFi Ralph
- Mirai
- Spider-Man: Un Nuevo Universo
Este fue el primer año, desde el 2003 que Dreamworks no estrenó un proyecto en los cines y eso sin duda marco una gran ausencia en ese 2018.
Illumination intentó mejorar una historia que ya se había contando bien dos veces (en cortometraje animado y en pelicula live-action) con El Grinch y fracasó en el proceso, pese a la excelente voz de Benedict Cumberbatch (quizá en México influyó que metieron la voz de Eugenio Derbez).
Sony Pictures Animation decidió cerrar la trilogía de Hotel Transylvania con Monstruos en Vacaciones, una cinta que tuvo un éxito considerable (aunque palideció frente al monstruo llamado Increibles 2) y que ayudó a dejar un final aceptable en la franquicia. ¿Apertura para una cuarta entrega? Quizás.
Warner Bros. lanzó dos cintas realmente olvidables, una fue Pie Pequeño, donde se cuenta la historia de un hombre que hace amistad con un Pie Grande y de pronto causa problemas en la comunidad de esta creatura en el proceso, y por el otro lado Teen Titans Go!: La Película, cinta basada en la serie infantil de Cartoon Network, que cumplió con su propósito de divertir al público, pero que, enfrente de Avengers: Endgame o Spider-Man, no tenía nada nuevo que aportar mas que ver a la Mujer Maravilla cantando con la voz de Halsey.
España tuvo su cinta, Luis y los Marcianos; Francia lanzaría Asterix y el Secreto de la Pócima Mágica y México, de la mano de Anima Studios cerraba la saga de las Leyendas con El Charro Negro e intentaría revivir otra serie animada extranjera con Ahí Viene el Cascarrabias. Obviamente Anima se vió literalmente de salida pues ninguna de sus cintas tuvo el éxito deseado en un mercado que ya solo buscaba comedias fáciles.
2018 en resumen no fue un año tan bueno en la animación y eso se vió reflejado en la calidad de las películas que no llegaron a las nominaciones, asi que no podemos dar una que no haya sido considerada en las nominaciones.
En la terna independiente, fue un año bastante regular en la animación, donde las cinco cintas tuvieron cierta aceptación, pero solo Mirai lograría sobresalir de todas.
Ce Magnifique Gateau! (¡Qué Rico Pastel!) fue una producción francesa en stop motion que muestra cinco relatos relacionados con la colonización africana. Al igual de lo ocurrido con El Zorro Malvado un año antes, la inconsistencia entre las cinco historias juntas y el hecho de que no tuvo una buena distribución la dejó prácticamente como la menos conocida de la terna.
MFKZ era una cinta donde se repetia ver a una compañía francesa y una japonesa para desarrollar una historia de ciencia ficción con acción y mucha violencia que no llegó muy lejos en su distribución y que, a decir verdad, uno trata de entender que lo llevó tan lejos en las nominaciones, especialmente cuando las críticas la destrozaron completamente.
Ruben Brandt: Coleccionista es una cinta de misterio hungara que marcó la primera cinta de ese país en competir en los Annie Awards, con una forma de animación algo singular que permitía incluso tener una apreciación a diferentes obras del arte moderno. Ganadora en varios festivales en Europa, la cinta tuvo un gran triunfo al llegar hasta esa instancia pese a la distribución tan pobre que tuvo en el continente americano.
Tito y los Pájaros fue la cinta latinoamericana en la contienda, donde se maneja una alegoría sobre el miedo representada en una epidemia que comienza a azotar un país y el hijo de un inventor usará su invento para comunicarse con los pájaros y salvar el día. El estilo de animación y el uso de colores le permitió a la cinta sudamericana colarse en la terna.
De las películas nominadas de los grandes estudios, fue El Cavernícola la que se quedó en la orilla camino al Oscar. Aunque la cinta de Aardman Productions mantenía ese estándar con el que la productora llegó al Oscar con cintas como Shaun el Cordero, el guión ha sido uno de los más flojos que le hemos visto a la animadora, al centrar su historia en un cavernícola que descubre que su tribu parece tener talento para el fútbol y decide retar a una civilización mas avanzada en ese deporte.
Y debo decirlo, es una cinta divertida, pero que se torna inconsistente, especialmente cuando vemos precisamente que el futbol es el mcguffin que mueve la historia hacia adelante y que nos termina dejando una película demasiado predecible al final.

Mirai (Mi Pequeña Hermana) fue la ganadora en la terna de Película Independiente o Extranjera en los Annie Awards y la única cinta extranjera en contender a los Academy Awards ese año. Una historia que pretende marcarnos el impacto emocional que puede tener para un niño el nacimiento de un hermano (o en este caso, hermana menor) en su vida y. cómo una visión en el jardín le permitirá al niño entender la historia de su familia, tanto en su pasado como en su futuro, la cual le enseña lecciones importantes que le permiten comenzar a madurar en sus relaciones.
Fue una cinta que tenía una animación que desafiaría a varios títulos fuertes de esa década, aunque con un guión un tanto convencional, un tanto predecible. Pese a ello, Mirai si tenía suficientes méritos para estar en la terna de ese año sin ninguna dificultad, pero sin suficiente fuerza para ganar.
Disney tuvo dos apuestas y, aunque ambas fueron bastante buenas, me pongo a dudar que alguna de ellas hubiera vencido a las que para mi, eran las dos favoritas.
Wi-Fi Ralph, secuela de la exitosa Ralph El Demoledor nos cuenta las aventuras y desventuras que el villano de videojuegos reformado tiene cuando decide viajar por internet para adquirir una parte que salvará el juego de Vanellope de ser apagado para siempre.
Aunque tiene varias cosas que sobresalieron en la historia (para empezar el crossover más impresionante que Disney haya tenido hasta la salida de Avengers: Endgame y, no, no me refiero a ver a todas las princesas de Disney juntas), el guión sin duda caía mucho en la parodia de otras historias de Disney (ahora si pongan a las princesas aqui) y esto debilitó mucho la propuesta de Walt Disney Animation en ese año.
Pixar vino con una secuela que habíamos esperado por mucho tiempo y que no defraudó en Los Increíbles 2, con el regreso de Brad Bird a Pixar y dando continuidad a la historia contada en la primera cinta donde la familia Parr enfrenta la necesidad de ocultarse cuando el duelo contra El Excavador no termina muy bien y Elastigirl de pronto tiene la oportunidad de destacar fuera de la sombra de su esposo.
La secuela tenía casi todos los elementos que nos gustaron de la cinta original, especialmente agregar más sobre Jack Jack, el bebé con superpoderes, cuya escena contra el mapache fue para mi una de las mejores escenas cómicas del año. Pero, también tuvo algo que muchas cintas de Marvel presumieron en esos años y que Pixar también mostró un villano realmente débil que, se veía muy mal incluso frente a Síndrome en justificaciones y acciones. Además el guión empoderador no parecía sentar bien con la historia de la señora Parr.
No es que fuera una cinta mala, solo una secuela que no llegaba a superar a la primera cinta, que arrasó con la taquilla, eso sí, que gustó, eso si. Pero que fuera a merecer el Oscar, eso lo dejaba en duda. Es más, hasta diciembre de ese 2018, sentía que Disney ya le estaba dando en bandeja de plata la estatuilla a Pixar.
Eso pese que había una gran candidata a ganar en Isla de Perros, la producción animada de Wes Anderson, quien venía de sorprendernos unos años antes con El Gran Hotel Budapest. Una exquisita historia de stop motion sobre el hijo de un funcionario que decide viajar a una isla donde todos los perros están exiliados para encontrar a su mascota y regresarla a casa, mientras en el Japón se desata una polémica por la decisión de exiliar a los perros.
Y como buena cinta de Wes Anderson, tenemos todos los elementos para adorarla y todos los elementos para odiarla. El diseño de los personajes, aunque no era de lo más agradable en los humanos, si lo era en los perros, lo suficiente para sentir simpatía tanto por el perro principal de la trama como de sus compañeros de la jauría. Había una inclusión tremenda de actores que prestaron su voz en la historia, como ocurrió con El Fantástico Señor Zorro y vamos, hasta Yoko Ono hizo bien su chamba.
El problema de Isla de Perros fue el hecho de que tenía una historia que empezaba muy bien, pero se alenta mucho en el desarrollo y termina siendo algo frustante al final, quizá por ser tan predecible, quizá porque nos pega duro en el sentimiento respecto a los perros abandonados. En fin, Isla de Perros era una obra maestra que, para mi, era la que debió haberse llevado el Oscar a expensas de Los Increíbles o que iba a perder injustamente contra Pixar…
Pero.. nadie espera a la Inquisición Española….
…o en este caso al distribuidor que jaló el primer Razzie para una cinta animada el año pasado.
Aunque no eran los mismos equipos, Sony Pictures Animation era la encargada de distribuir Spider-Man: Un Nuevo Universo, una cinta producida por Phil Lord y Christopher Miller, aquellos que se quedaron en la orilla de las nominaciones por La Gran Aventura LEGO unos años antes y que, con la dirección conjunta de Bob Persichetti, Peter Ramsey y Rodney Rothman, contarían la historia que combinaría dos historias muy conocidas del Ultimate Spider-Man.
Miles Morales, un joven afroamericano es picado por una araña radioactiva y es testigo de la muerte de Peter Parker, el Hombre Araña, mientras, al mismo tiempo, otros Hombres y Mujeres Araña de diferentes universos alternos brincan frente a su vista y se ve obligado a resolver una crisis en un multiverso que sin querer ha jalado Kingpin para buscar redimir un error del pasado.
De pronto estábamos frente a una de las grandes sorpresas del 2018 en términos de animación, desde el momento en que vimos las primeras escenas que se compartieron tras la cinta de Venom, nos dimos cuenta que la experiencia sería muy distinta a la que habíamos visto con otras animaciones, luego el reto de incluir diferentes estilos de animación en la historia (sobretodo cuando teníamos a SP/DR, Spiderman Noir y Spider-Ham al mismo tiempo) y una rítmica que hacia que la historia se contara de manera ágil, divertida y que no perdiera el ritmo en ningún momento.
Aunque le fallaba un poco la trama, especialmente cuando quieres ver más de los otros Spidermen, la forma en que vendieron la historia era bastante unica en su momento, ademas supo apelar bien a la audiencia primaria a la que iba, con un personaje que realmente podiamos sentir como un miembro de esa audiencia que intentara llegar a ser como los Spidermen que se ve obligado a seguir.
A la hora de los premios, donde se veia a Los Increibles 2 como gran favorito con 12 nominaciones, termino viendo como Spider-Man ganaba no solo Mejor Pelicula sino tambien las otras seis nominaciones que tuvo en los Annie Awards. La cinta de Pixar solo se pudo llevar dos premios esa noche.
Fue inevitable entonces pensar que se daria una gran sorpresa en los Premios Oscar y asi fue, el superheroe de Marvel, uno que ni siquiera estaba considerado en el canon oficial hasta hace algunos años y que se fue ganando popularidad sin la ayuda de Peter Parker, sin siquiera aparecer en el Universo Cinemático (salvo una breve mención en la cinta Spiderman: de Regreso a Casa) le ganaría la partida a los superhéroes de Pixar y rompería una larga racha que Disney y Pixar tenían ganando el premio desde que Rango lo ganó en el 2010.
Un triunfo que fue un momento de alivio para los que vimos con critica esa entrega de los Oscares donde fuimos felices de ver que Alfonso Cuaron le diera a México su primer Oscar a Mejor Pelicula en Lengua Extranjera pero perdiera su cinta Roma frente a The Green Book en una de las premiaciones más polémicas del siglo.
Ya para cerrar, en la última entrega, veremos como Disney y Pixar nos recetaron una secuela que nadie necesitaba ni quería y se enfrentaría a una cinta navideña que nadie esperaba y quizá nadie pensaba que iba a querer ver una y otra vez.