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Relatos Cortos

Justo a tiempo

Heme aquí, sentada en la arena, en está playa que no era ni tuya ni mía, sintiendo como la brisa del mar acaricia cada parte de mí. Y, como siempre estoy soñando y jugando con lo que podría ser el futuro, con lo que ya fue y hasta con mi presente.

Pero estoy en el momento justo, ni más ni menos, solo ahí, justo a tiempo. Y como lo prometiste, cerré mis ojos, y tus besos y abrazos ahí estaban con cada ola que iban y venían.

Estabas ahí, con ese atardecer, y así como el sol marcaba mi piel, tú lo hiciste con tú sabor y con tú olor.

Todo en ese instante era tan maravilloso, sentí una paz, algo que nunca había imaginado y tus enseñanzas, ahora las entiendo y sé que el tiempo siempre estará ahí, pero la vida se escapa tan fácil como la arena entre las manos.

Pero ahí, justo ahí, era mi tiempo, mi vida y mi todo.

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