La juventud, aquella época en la que muchos de nosotros ingresamos a los primeros años de la educación secundaria, jóvenes e inocentes y, en bastantes casos, pensando que un gran futuro nos espera. Esos pensamientos y vibra positiva no terminan por el hecho de tener un bocado de realidad al conocer a nuestros compañeros de clase, en algunos casos inolvidables amistades que perduran a través de los años. En otros conocemos a nuestros rivales o a quienes en más de una ocasión intentan aprovecharse o recurrir al conocido acoso (bullying). Todo lo anterior pasa a segundo plano cuando estás feliz y contento, dedicado a tus estudios y sumido en tus pensamientos, cuando de la nada aparece alguien menor, un kohai, y dándote un golpe certero, en una primera impresión te hace llorar. ¿Esto los representa? probablemente no, pero en el caso de Naoto Hachiōji su vida da un completo giro cuando conoce a Nagatoro Hayase.
Un poco de antecedente
Como toda historia antes de llegar a las pantallas de televisión Ijiranaide, Nagatoro-San fue un manga creado por Nanashi quien originalmente tuvo su publicación en línea a través de Magazine Pocket de Kōdansha en Noviembre del 2017, posteriormente llegaría en Abril de este año la versión anime realizada por el estudios Telecom Animation Film para la televisión y que ahora gracias a la plataforma de entretenimiento Crunchyroll podemos verla a una par de horas de su estreno en Japón.
Pasemos a la reseña de Ijiranaide, Nagatoro-San
Naoto Hachiōji es un joven estudiante del segundo año de la educación secundaria, como muchos es tímido y reservado, siempre sumido en su mundo y haciendo sus actividades favoritas que son el dibujo artístico y el manga, un par de aficiones que lo conducen a ser un miembro activo del club de arte de su escuela, también situaciones que lo convierten en una persona alejada de la gente, y es por eso que no cuenta con muchas amistades, ni siquiera de su salón de clases.
Cierto día, Naoto pensó en ir a la biblioteca de la escuela para dedicar tiempo a sus estudios y también a buscar un lugar en donde estar tranquilo y alejado de las personas, pero las cosas no le salen como el esperaba ya que un grupo de chicas del primer grado se encontraba ahí conviviendo y conversando animadamente, algo que a Naoto le incomodó pero a pesar de su excesiva timidez, optó por entrar e ir a un espacio un poco alejado del grupo que en un momento lo siguió con la mirada.
Todo iba tranquilamente hasta que una de ellas se acercó para dar una mirada a los libros cercanos a Naoto y, pues bueno, cuando uno se concentra en no cometer una tontería es cuando suceden más rápidamente, es así como se pone como blanco para una de las chicas quien se enfoca profundamente en él. Este primer acercamiento entre Naoto y esa chica del primer año es lo peor que le podría pasar a un chico, más que nada por que ella empieza molestarlo de tal forma que logra hacerlo llorar de la manera más hilarante posible, posteriormente ella lo calma para nuevamente seguir molestándolo, pero a cambio ella le dice su nombre, Nagatoro Hayase.
Naoto Hachiōji esperaría que este evento sea sólo de una vez, pero a pesar de toparse con ella e intentar ocultarse resulta imposible ya que Nagatoro lo tiene en la mira y es así como subsecuentemente ella continua visitando con mucha frecuencia a Naoto, obviamente para continuar molestando e incomodando en una gran variedad de formas para hacerlo sentir mal, incómodo y hacerle notar constantemente que es un pervertido, eso sin importar el lugar donde se encuentre y es así como toma como lugar de visita la sala asignada al club de arte.
Portadora de una personalidad cínica y desvergonzada a Nagatoro le encanta avergonzar a Naoto, algo que logra constantemente al hacer que siempre se sobresalte, sonroje o perturbe con las descripciones o señalamientos que siempre hace.
No todas las cosas malas se centran en Naoto puesto que las bromas y acoso de Nagatoro en ocasiones se le salen de control causando que la situación hilarante e incómoda se vuelque a ella, además de que ahora el grupo de amigas no ha podido evitar notar la afinidad de Nagatoro con Naoto, algo que ahora recae en ellas la obligación de continuar molestando pero a ambos, llevando así a generar situaciones en las que Nagatoro no puede evitar mostrar molestia pero tratando de ocultar que siente celos de que alguien más se acerque a su víctima.
A pesar de que Ijiranaide, Nagatoro-San dura como todo anime aproximadamente 23 minutos cada episodio se divide en dos partes, a veces teniendo temas completamente distintos o dando continuidad en el mismo, aunque al no tener una historia lineal todo se centra en la comedia entre los dos personajes principales y que en ocasiones se da entrada a otros más.
El estilo de animación luce bastante bien y es sumamente expresivo en cuanto a las reacciones de los personajes, lo que también muestra las ya conocidas súper deformaciones para de esta forma darles una mayor expresividad en situaciones cómicas.
La serie incluye también el ya conocido «fanservice» el cual se ve mezclado con las condiciones de comedia que ofrece la serie, situaciones que se encuentran muy bien realizadas y adaptadas para el anime, sin duda algo que les sacara entre sonrisas y risas.
Para terminar con mi reseña les hago la recomendación para darle una mirada a Ijiranaide, Nagatoro-San, sin duda algo que les sacara entre sonrisas y risas con distintos aspectos y situaciones bien aprovechadas las cuales conducen a momentos acompañados de mucha comicidad, probablemente la juventud de muchos de nosotros fue muy diferente, pero habría sido más divertido pasarla habiendo tenido una Nagatoro con nosotros, ¿o no?.
Como menciono al principio de la nota Ijiranaide, Nagatoro-San pueden encontrarla en Crunchyroll, está al momento ya cuenta con 10 episodios emitidos y con estreno de nuevos los sábados a las 11 de la mañana.
Calificación
